Muchas personas llegan al matrimonio ignorando cómo vivir en pareja. No saben cómo desenvolverse en cuanto a la relación, las emociones, la autoestima y -sobre todo- el dinero.
No comprenden cómo hacer negociaciones ganar-ganar para ser felices, casi siempre uno de los dos gana y el otro pierde, descompensando el valor de uno sobre el otro.
Es vital la comunicación en la pareja sobre sus finanzas para administrarse mejor; los tiempos han cambiado y ahora, aunque estén juntos, cada uno tiene su independencia, es decir, “juntos, pero no revueltos”.
Al no separar presupuestos surgen conflictos porque probablemente uno de los dos se gastó el dinero que ahorraron o hay desacuerdos en las compras no consideradas necesarias por uno de los dos.
Platicamos con Ángel González, especialista en riqueza integral, y ante esta situación nos recomienda tener un sistema de administración financiera en pareja.
Ángel nos comenta que es importante comprender que una pareja son dos individuos con antecedentes completamente diferentes de vida, que, aunque al comienzo están enamorados y todo es muy bonito, esa etapa tiende a pasar, y comienzan los choques con la cotidianidad.
Si realmente se desea tener una relación sana en el matrimonio hay que mantener la estabilidad financiera dado que este es uno de los principales temas que se abordan.
Ángel nos dijo que el primer paso es generar un sistema de administración financiera para ambos, en donde cada uno pueda tener su economía individual y en las cuestiones comunes ejercer negociaciones de ganar-ganar.
Un ejemplo pueden ser las necesidades de la casa o los hijos, ahí es donde acuerdan cómo solventar sin alterar las finanzas individuales. Si la mujer quiere comprarse una nueva bolsa debe contar con recursos propios para darse su gusto sin que afecte al otro, esto evitará justificarle en qué ejerce su dinero.
Si existe la economía en común, conviene separar un presupuesto para que cada uno tenga poder adquisitivo para comprar lo que desea, evitando confrontaciones y resentimientos por alterar la vida financiera de la familia.
Se unen con la ilusión de “juntos para siempre” pero la realidad es que entre un 50 ó 60 por ciento de los matrimonios se separan.
Ángel nos compartió también que, en su experiencia ha encontrado mujeres que están atadas a una relación por el hecho de que nunca se volvieron independientes financieramente, sufre ella y sus hijos porque soportan maltratos e injusticias por la vulnerabilidad económica.
Otro caso son los hombres que se divorcian, en el matrimonio estaban establecidos económicamente e incluso con ciertos lujos, ante la separación pierden hasta la sonrisa, quedándose en austeridad porque no había un acuerdo claro en la cuestión financiera.
Es muy importante hablar de dinero en la pareja dado que van a construir una vida en común, hacer acuerdos financieros previos al matrimonio.
Lo que nos comparte Ángel es que hasta cierto punto ayuda el aclararlo legalmente, pero primeramente y lo recomendable es arreglarlo con comunicación clara, sabiendo qué es realmente la felicidad, qué es el amor y qué es ganar-ganar. De hecho, con una asesoría pueden establecer qué es lo que emocionalmente les atañe respecto a lo material, llegando a acuerdos de manera más amable. Esto en vez de hacer las cosas complicadas ayuda y da armonía para mantener una relación duradera.
Publicado en Sección CANACO Mujer, Revista Para Emprender por Tania Valencia